Cuidados en el nacimiento y calostro
Objetivo
Los cuidados en el nacimiento y el calostro son vitales para el éxito de la cría de la ternera: más de la mitad de la mortalidad tiene lugar en los dos primeros días y uno de cada dos terneros no dispone de suficientes anticuerpos.
Información complementaria
El calostro es el primer alimento indispensable. Los anticuerpos que contiene el calostro constituyen el primer medio de defensa del ternero (protección contra bacterias y virus presentes en el entorno).
Un buen calostro debe contener como mínimo 60 g/l de inmunoglobulinas.
El calostro es mucho más energético y tiene mayor concentrado de vitaminas y minerales. Está enriquecido con inmunoglobulinas que aportarán la única protección contra bacterias y virus presentes en el entorno de los terneros. Posee un excelente valor alimentario y permite aportar energía a los terneros. Al nacer, los terneros tienen pocas reservas y pierden mucho calor.
La calidad del calostro, y especialmente su contenido en anticuerpos, varía de una vaca a otra y también dependerá de la calidad de su alimentación al final de la gestación. Por eso es importante controlar la calidad de su calostro y crear un banco de calostro congelado.
Al igual que la calidad inmunitaria del calostro, la capacidad de absorción intestinal de las inmunoglobinas se divide a la mitad 12 horas después del nacimiento.
Recomendaciones
- Limpiar los conductos nasales para eliminar el moco presente en las vías respiratorias.
- Frotar con paja el ternero o dejar que su madre lo lame para evitar riesgo de hipotermia.
- Dar un mínimo de 2 litros de calostro en las 2 primeras horas de vida (la leche del primer ordeño contiene dos veces más anticuerpos que el del segundo ordeño).
- Volver a dar 2 litros de calostro entre las primeras 6 y 12 horas de vida.
- Admimistrarlo de 2 a 3 días (capa protectora en la mucosa intestinal).
- Desinfección del cordón umbilical
- Garantizar al ternero un local limpio y un lecho con suficiente paja